The Spectrum – Videojuegos de hace 40 años
Como no es novedad para muchos, cada año tenemos algún par de consolas nuevas en el mercado, y no me refiero a las de Aliexpress ni a las nuevas consolas de Sony, Nintendo o Microsoft. Hablo de recreaciones de consolas/PC del pasado con las que empezaron los videojuegos en gran parte, y ahora le ha tocado al clásico Sinclair ZX Spectrum, un microordenador de la década de 1980 con el que muchos desarrolladores hicieron grandes títulos. De hecho, hoy día, todavía hay gente desarrollando para estos sistemas de igual manera que, por ejemplo, para MSX, y más de la que parece. The Spectrum es una versión moderna del Sinclair ZX Spectrum capaz de emular los modelos de 48 y 128 kB, y de la que hoy os podemos hablar gracias a Plaion.
Un pack completo para los amantes del retro
Vamos a comenzar hablando de The Spectrum por un poco los contenidos de la caja y accesorios que hay disponibles (venta aparte). Primeramente, por la caja de The Spectrum, en la que se incluye obviamente la recreación The Spectrum, un completo manual de instrucciones, un cable USB-C con terminación en USB-A para conectar a la corriente y un cable HDMI para conectar a nuestro monitor. Es algo sencillo, pero es todo cuanto necesitamos, eso sí, todo viene bastante bien empaquetado y la caja es bastante bonita para guardar en la estantería (sí, soy amante de las cajas, aunque esta va de vuelta a Plaion).
Como accesorios para The Spectrum, tenemos The Gamepad, un mando que va de perfectamente de la mano con The Spectrum, además de ser compatible con THE400, THEC64/VIC20, THEA500, PC, Mac & Linux. Confieso que el mando me ha parecido bastante bueno, con botones bien sólidos y buen feedback, además de que pesa poquito, es relativamente pequeño y es cómodo de sostener, además de contar con acceso directo de vuelta al menú principal. Eso sí, no es un accesorio obligatorio, os valdrá cualquier gamepad que tengáis por casa mientras que sea conexión por USB.
Para rematar, se incluye un ejemplar de la revista «Crash Micro Action», con bastante información sobre The Spectrum, un poco de historia y muchas reviews de los juegos que hay preinstalados en la consola, así como algo también de información sobre juegos modernos que podéis añadir a vuestra The Spectrum. Porque sí, aunque vienen 48 juegos preinstalados, podéis añadir más simplemente con un USB. Soporta TAP/TZX/PZX/SZX/Z80/SNA.
Un diseño sencillo y funcional
The Spectrum me resulta bastante bonito en cuanto a su diseño. No pesa demasiado, ocupa poco espacio en la mesa, y es una réplica del Sinclair ZX Spectrum 16K/48K, arcoiris incluido. Además, es totalmente funcional, es decir, el teclado sirve por completo, puedes jugar, y hasta puedes llegar a programar en BASIC si quieres acabar del todo con tu vida. De verdad, eso se lo dejamos a los jugadores que quieran aprovechar el 100% del producto, aunque hoy día con internet podéis probar cositas si os apetece.
En la parte trasera de The Spectrum vamos a encontrar su alimentación, mediante un USB-C de 5V, que podéis usar cualquiera compatible que tengáis por casa, y la conexión HDMI para conectar a vuestro televisor o monitor. También hay disponibles 4 puertos USBs para conectar más gamepads y disfrutar del multijugador mientras tenéis conectado un USB con vuestra propia colección de juegos. Y bueno, el botón de encendido y un botón para volver a la home de manera instantánea en cualquier momento.
Que yo no he tenido la original, y me guio por los modelos, de hecho yo no era ni proyecto de vida en aquel entonces. Pero es cierto que comparando con modelos de internet, esta réplica cumple bastante bien con la palabra replica. Aun así, no solo eso, a mí, como usuario, me gusta que sea algo que ocupa poco espacio y pueda tener en un sitio. Además, algo que me olvido de decir, cuenta con unas gomillas antideslizantes en la parte trasera que la dejan en el sitio a la perfección.
Experiencia de juego: caótica en juventud
Una vez que hemos instalado nuestra The Spectrum en la mesa, conectado a nuestro televisor, y seleccionado idioma y salida de vídeo, toca… disfrutar. En The Spectrum vienen ya preinstalados un total de 48 juegos, contando con títulos como Manic Miner, Head Over Heels, Saboteur! Remastered, The Hobbit, Army Moves o The Great Escape. Aunque a nivel personal, es cierto que he disfrutado otros títulos como Alien Girl: Skirmish Edition, Cosmic Payback, Penetrator o Saboteur! Remastered. Y bueno, como no podía estarme quieto, aproveché para probar el Castlevania: Spectral Interlude gracias a la compatibilidad con juegos por USB.
Debo decir, que mis primeras partidas con The Spectrum fueron bastante caóticas. Yo ya nací en la generación del gamepad y el WASD, y al intentar jugar con el teclado aquí, es que me he vuelto loco, es totalmente sacado de otro mundo, de ahí el título de la sección del análisis. Poco a poco, te vas acostumbrando, pero es un duro trabajo, imagino que los más veteranos no tendrán problemas. Es cierto que una vez conectado el gamepad, ha sido otra cosa, y menos mal, me sentía un señor mayor intentando entender TikTok. Añado que, además de la sección en su web, la cual incluye bastantes instrucciones para cada juego, podéis consultar los controles antes de comenzar desde la propia The Spectrum, así que si no sabéis de qué va la cosa, tocará consultar.
Como extras, tenemos opciones más modernas y dignas de la emulación cuando jugamos. Olvídate de los códigos para regresar al nivel en el que te quedaste, comienza a guardar la partida como un jugador moderno. Y no te mueras, porque si lo haces puedes rebobinar la partida y hacer como que aquí no ha pasado nada. A nivel visual, podemos añadir un clásico filtro CRT, añadir reborde a la pantalla de juego y unos fondos para que no veamos la pantalla negra siempre, algo similar realmente a lo que ha hecho en muchas colecciones de juegos antiguos que se han traído mediante emulación. Es más, incluso existe la posibilidad de activar el modo ULAplus para gozar de una mayor variedad en la paleta de colores, y creedme que cambia bastante.
Conclusiones del análisis de The Spectrum
Debo decir, que como alguien que no jugó ni tuvo dicho microordenador en su casa, este fin de semana que he estado disfrutando de The Spectrum ha sido entretenido. Ya sabéis que encajo perfectamente que los juegos, no son de mi época, por lo que, obviamente, en eso no voy a entrar, es un producto diseñado más para quienes sí lo tuvieron en su día. Aun así, creo que es una buena pieza para la colección, aunque no sea la original (algo por lo que rabiará más de un coleccionista), pero es un producto hecho para ser disfrutado y recordar cierto momento en el mundo de los videojuegos y darle bien duro a la nostalgia. Tiene buenas y nuevas funciones añadidas, trae 48 juegos preinstalados, ampliables mediante USB y sin mucho problema, y un repaso a la historia de los videojuegos, junto a sus demás réplicas hermanas por parte de Retrogames. Vamos, una buena pieza para amantes del retro y que quieren sentir de nuevo ese momento de su vida, o explorar el pasado de los videojuegos. Creo que lo único negativo es que el gamepad es un accesorio aparte, y acostumbrados a tiempos modernos, casi que hace falta.
Nota: 9/10
*Este análisis ha sido realizado con una unidad en préstamo proporcionada por Plaion.
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