Caminante no hay camino, se hace camino al andar
O en este caso con Heading Out, al conducir por las carreteras con interminables rectas de Estados Unidos en los años setenta, quizás los ochenta, no está muy claro, mientras escuchamos varias emisoras de radio con buena música y a sus locutores contar historias sobre la Norteamérica profunda, los problemas políticos, de la sociedad y del sistema, sus propios problemas y también de nosotros, que nos vamos convirtiendo en una leyenda de la carretera y hemos captado la atención no solo de la policía por ciertos actos nuestros, si no también de mucha gente curiosa que a veces serán nuestros fieles seguidores o nuestros rivales.
En nuestro camino vamos a tener que lidiar y vivir todo tipo de emociones y sensaciones que debido a nuestros actos, repercutirán en la imagen que la gente irá teniendo de nosotros, pero en este caso, nuestras elecciones también repercutirán en que nuestro miedo nos alcance en una carrera que parece no tener fin, que se repite una y otra vez acabando siempre de la misma e inevitable forma.
Pero lo que el estudio polaco Serious Sim y Saber Interactive han buscando con Heading Out, no es que lleguemos rápidamente al final del camino, si no que aprendamos no una ni dos, ni tan siquiera tres, si no varias lecciones durante el camino y las distintas veces que lo realicemos en bucle, porque como se suele decir, lo importante no es el destino, sino el viaje.
Así como Indika, título que analicé recientemente, nos llevaba por un viaje a pie de autodescubrimiento ahondando en la filosofía, lo trascendental y religioso, literalmente este juego nos lleva a recorrer otras rutas y de otra manera en un viaje más emocional en el que vamos a descubrirnos también, a mostrar como somos desde el minuto uno en el que empieza el juego, que nos motiva o como dice el juego, qué cuentan los rumores sobre nosotros.
Escapa de tus miedos, supéralos… enfrentalos
Permitidme que me ponga un poco trascendental y os diga algo que ya sabéis, que os habrán dicho mil veces y a lo que de seguro como respuesta, al igual que yo, habréis dado una respuesta negativa ya fuera con un gesto en vuestro rostro o quizás con palabras. «No tengas miedo, supéralo, enfrentalo».
¡Mis «pokebolas» 33! Es muy complicado superar y menos aún, enfrentar nuestros miedos, por eso corremos y escapamos de ellos, a veces de forma figurada, otras veces de forma literal, pero es lo que nos hace humanos, pero sí es cierto que algunas personas logran pararse, dejan de correr y van directos de cabeza contra lo que les causa ese miedo. Eso es básicamente lo que trata de enseñarnos Heading Out a la vez que por el camino, en ocasiones largo e interminable camino que se repetirá en bucle varias veces (no diré cuantas para no hacer spoiler), nos dará golpes de realidad con pintorescos personajes y situaciones de lo más variadas.
Todo esto encarnando el personaje de Jackie, que nunca nos queda claro si es hombre o mujer, o quizás sí, se despierta de lo que aparentemente es un accidente de tráfico y siendo consciente que algo o alguien está controlando su vida y no precisamente el narrador del juego, quizás un ser superior…o que se encuentra en un nivel mucho más inferior e infernal, echa a correr escapando de sus miedos y cruzando américa de punta a punta, rápidamente se gana el sobrenombre de «Lebrílope» (Jackalope), porque al igual que este animal mítico del folclore norteamericano, Jackie es veloz, de gran timidez, difícil de observar y cuando se acorrala, un animal muy peligroso.
Precisamente este título busca a través de este carácter y forma de ser, enfrentarnos a muchas y variadas situaciones que nos ayudarán a entender el trasfondo real de Jackie, pero también sobre nosotros mismos mientras tomamos decisiones sin vuelta atrás, siguiendo diferentes rutas en nuestro camino, mostrando los resultados de nuestros actos tras tomar posibles decisiones y finalmente enfrentando nuestros miedos.
Eso nos convertirá para muchos en un antisistema, en un fuera de la ley o un enemigo al que dar caza y hacer que su carrera se termine, pero para muchos otros seremos un salvador, un antihéroe, un ejemplo a seguir e incluso una especie de mesías gracias a nuestros actos y forma de vivir.
Cierto personaje de una saga rápida y furiosa, dice que vive la vida a un cuarto de milla, aunque en nuestro caso será minuto a minuto en lo que duran las canciones o diálogos de los locutores de radio, mientras vamos cruzando estados, parando en pueblos o deteniendonos en el camino por alguna carrera o evento, mientras escapamos no solo de nuestros miedos, si no también de la policía que querrá darnos caza, pero no estamos solos en el camino.
Los Cuatro Jinetes de las ondas radiofónicas
Mientras cruzamos de punta a punta el mapa de Estados Unidos con un destino diferente en cada bucle y en el que al completar cada uno de ellos conseguiremos desbloquear un coche diferente, elegimos los distintos caminos por los que encarar la ruta mientras forjamos nuestra leyenda ganando fama y respeto con nuestros actos. Esto repercutirá en la forma en la que cuatro estaciones radiofónicas de lo más variado van a vernos y lo reflejarán en sus locuciones, potenciando de esta manera también la presencia policial o de competidores que querrán enfrentarse a la «Lebrílope Interestatal«.
Sus diferentes personalidades son un reflejo, no solo de los años en los que se basa el juego, si no que también de alguna manera representan hechos y situaciones que vivimos hoy en día, todo con un planteamiento bastante bueno y donde nos encontramos desde un locutor conservador de los que piensa que primero se dispara y luego se pregunta, a una locutora que enciende mechas buscando una revolución arcoiris, mientras que el resto nos muestran el lado más humano que muchas veces creemos perdida en la sociedad.
Pero no solo vamos a escucharles a ellos cuatro «sermonearnos» en nuestro viaje en contadas ocasiones o al terminar ciertas zonas. También escucharemos música y muy buena, de todos los tipos, aunque principalmente Rock sureño, por momentos con cierta melancolía, aunque también algún que otro tema bastante intenso y que nos insta a revolucionar el motor pisando a fondo el acelerador, aunque cuidado, eso alerta a la policía y hará que nuestro nivel de búsqueda suba como la espuma, aunque no solo eso lo conseguirá.
Como dije antes, nuestros actos repercuten de mucha manera en nuestro camino y en las personas que nos vamos cruzando en nuestra aventura, por eso debemos vigilar muy bien nuestra fama, reputación, nivel de búsqueda y por otro lado, la concentración al conducir si no queremos terminar dormidos y estampados contra un camión o algo peor.
Por eso, también al llegar a pueblos o ciudades, si disponemos de dinero, tras explorar la zona y encontrarnos inevitablemente con alguna historia en la que participar y descubrir algo más sobre Jackie, también podemos descansar y recuperar concentración, aunque todo el tiempo que perdamos, es tiempo que nos comerá el miedo que inevitablemente y a todo gas, se acerca hacia nosotros.
Aunque afortunadamente disponemos de opciones para parar el tiempo restante hasta que el miedo nos alcance, ya sea comprando «medicamentos» que aumenten nuestra concentración y mermen el tiempo en el que el miedo vuelva a actuar, o con nuestros actos y respuestas a ciertas situaciones que nos beneficiarán, aunque a veces quizás nos interese más detenernos y jugar al límite con el miedo pegado a nuestro culo y sacar beneficio económico o fama y reputación.
De nosotros depende que decisiones tomar y de qué, cuánto y de qué forma detenernos por el camino recogiendo encargos, ayudando a gente, robando o participando en carreras que nos den dinero, conseguir ciertos coleccionables (algunos de ellos de gran importancia), ser un buen samaritano aunque nadie lo tenga en cuenta, o ganar amistades que en el futuro nos terminarán ayudando o beneficiando, aunque quizás tu… si tú que me estás leyendo, prefieras escapar a toda velocidad para llegar antes a tu destino, sin pararte por el camino mientras te pierdes muchas respuestas, creyendo que todas están al final de la ruta marcada. Quien sabe, a lo mejor tienes razón y yo he perdido el tiempo en cada parada en la que he aprendido algo sobre la vida.
Apartado técnico
Como ya habréis visto, Heading Out es un título con un diseño artístico de lo más peculiar, que seguro a muchos de vosotros os recordará a lo visto en el cómic o las películas de Sin City de Frank Miller, con una base en blanco y negro en parte cel-shading donde un intenso color rojo resalta sobre todas las cosas, aunque también tienen bastante gran importancia el color azul y el amarillo, trayendo cada uno de ellos un significado de vital importancia y siendo en muchas ocasiones co-protagonista.
Ciertamente funciona muy bien junto a la narrativa y el camino por el que nos quiere llevar el juego en todo momento y aunque puede no gustar a todo el mundo, al final te acostumbras y hasta se agradece cuando captas el mensaje visual con las «señales» que te envía.
De igual forma se siente que pese a su carencia de colores, este título tiene un buen trabajo a la hora de representar las distintas zonas de Estados Unidos en los momentos en los que nos ponemos al volante de cualquiera de los cuatro coches, que por cierto, sin necesidad de mostrar marcas reales, son modelos que se diferencian entre sí en sus características y bastante reconocibles e incluso en las ilustraciones, dependiendo cual llevemos en ese momento, estas cambiarán mostrando uno u otro.
Todos los vehículos están muy bien modelados, no solo los que podemos conducir nosotros, también los del tráfico que vamos a ir esquivando, nuestros rivales o los coches de policía que no dudarán en bloquear la carretera o embestirnos para sacarnos de ella y obligarnos a hacer uso de las resurrecciones, infinitas en el modo narrativo o limitadas en el resto de dificultades.
Los escenarios como he dicho, son bastante variados, aunque llegados a un punto, sí que comienzan a sentirse repetitivos, sobre todo en el diseño de niveles y rutas, pero si te lo tomas como lo que es, vivir en un bucle, cobra más sentido.
Cada parada o situación que vivamos y en la que tenemos que tomar una decisión u otra, se nos representa con unas viñetas tipo cómic americano muy detallado y que enfatiza el apartado artístico escogido para este título, en el que vamos a encontrarnos muchos guiños o referencias a películas y series muy conocidas o de culto, que comparten bastante narrativamente y que en parte comparten el género «Road-Movie» con Heading Out.
En cuanto al tema sonoro, podría decirse que la música es casi otra de las principales protagonistas del juego, compartido con las voces de los locutores de las emisoras de radio. Son casi una veintena de temas, principalmente Rock sureño y alguno funky, pero todos transmitiendo en el momento justo lo que quieren hacernos sentir y vivir. Sin duda alguna la banda sonora es donde quizás más quiere resaltar este título, pero personalmente echo en falta más variedad de temas musicales en la acción, porque aquí ya no puedo justificar que se repitan tanto algunos, basándome simplemente en el bucle que nos presentan.
Las voces están en inglés, muy bien interpretadas por sus respectivos actores, pero en muchos casos, sobre todo en los que escuchamos a los locutores de radio, si no sabes inglés, se hace muy difícil leer los subtítulos en español sin estamparte contra cualquier cosa que se cruce en tu camino.
Conclusiones de Heading Out
Aprovechar los videojuegos como una vía narrativa o visual de expresión, crítica social o al sistema, autoayuda o descubrimiento como en este caso, siempre es algo que yo en particular valoro bastante, sobre todo si está bien hecho a nivel narrativo y termina por engancharte aunque sea en un bucle con un aparente y posible final, sea del tipo que sea, y termine por volver a hacerte jugar de nuevo.
Si además, le añades buena música y coches de todo tipo, con guiños y referencias a la cultura pop, cine y cómics, a mi me tienes casi automáticamente ganado, pero tengo que reconocer que aunque las intenciones son buenas y a mi me ha terminado enganchando durante más de ocho horas, terminándome el juego y volviendo a entrar en bucles para descubrir todos los secretos y misterios de este interesante mundo y sus gentes o el misterio real que rodea a Jackie, no todos lo veréis de igual forma.
Y todo por unas mecánicas que se repiten y alargan artificialmente demasiado, por sentir que no haces otra cosa que conducir sin muchos problemas, parar en cada evento o ciudad, leer, elegir una decisión y continuar así todo el tiempo con alguna persecución por medio hasta que terminas en tu destino o te da caza el miedo.
Pero si puedes soportar sobrevivir a muchos bucles, vivirás una experiencia narrativa que te pondrá contra las cuerdas a la hora de tomar ciertas decisiones, que algunas terminarán por decirte más sobre de ti de lo que podrías llegar a pensar, y que incluso puede hacer que descubras cómo eres en muchos aspectos.
Nota 8/10
*Este análisis ha sido realizado con una copia digital proporcionada por Honest PR.