Un aventura épica y filosófica en la Luna de Júpiter
El título indie de Novadust Entertainment con nombre de continente, nos transporta a un paraíso terraformado en la luna de Júpiter llamado Europa. En este juego, encarnamos a un simpático androide llamado Zee, cuyo propósito es explorar las ruinas de una civilización perdida y descubrir los secretos de la última colonia humana.
Este mundo, inspirado visualmente en el estilo de Studio Ghibli, aunque también tomando muchas referencias de The Legend of Zelda: Breath of the Wild, nos permite una experiencia cozy de «exploración zen» con plataformas y rompecabezas no muy complicados, todo ello en un ambiente menos hostil de lo que podríamos esperar en una luna congelada bajo la sombra de Júpiter.
Cabe decir que en los últimos tiempos me estoy aficionando mucho a títulos que buscan transmitir al jugador un mensaje positivo con una jugabilidad sencilla y bastante relajante, dejando de lado que nuestras pulsaciones suban al máximo y confieso que con Europa además su estética me llamaba mucho, aunque al final me he encontrado un título que tras una interesante narrativa filosófica y cierta belleza, tiene algunas lagunas.
Entre robots y filosofía Zen
La mecánica principal de Europa se centra en la exploración a través de plataformas 3D de un estilo clásico y un sistema de movimiento libre que recuerda al ya citado Breath of the Wild, con mecánicas de salto, planeo, y uso de un jetpack un tanto especial. La premisa es que Zee puede «fluir» por el entorno como un delfín por el agua, aprovechando un sistema que recarga su energía y permite sobrevuelos épicos a través de los paisajes llenos de vegetación, animales salvajes y robots guardianes.
Pero hay un detalle que le quita brillo y resta valor a la jugabilidad de Europa. El control del pequeño Zee a veces falla, y es que el personaje no siempre reacciona con la precisión que se podría esperar, algo que resulta muy frustrante en un juego de plataformas. Además, aunque el mapa nos invita a explorar, las constantes zonas limitadas y la falta de descubrimientos que realmente sean de cierta importancia, pueden hacer que esa exploración se llegue a sentir muy vacía.
La historia de Europa es una mezcla interesante de ciencia ficción y filosofía ecológica, que pasa de una utopía a una distopía y viceversa. La humanidad llegó a terraformar esta luna, pero debido a conflictos con los autómatas llamados «jardineros», el utópico paraíso se convirtió en un desierto de memorias y ruinas. A través de páginas del diario del «padre» de Zee, vamos a ir pudiendo sumergirnos en los eventos que llevaron a la destrucción de este mundo y en la lucha entre humanos y robots. La narrativa se va revelando de forma tranquila y casi de una manera predecible, sin giros impactantes, pero el enfoque poético que ofrece, le da una cierta profundidad introspectiva.
¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?
Con una mezcla de la obra escrita por el legendario Philip K. Dick y también Las aventuras de Pinocho de Carlo Collodi, en Europa vamos a no solo tener las páginas que vamos a ir encontrando desperdigadas por las distintas zonas del juego a lo largo de sus 14 capítulos, para de esta forma descubrir los citados eventos entre la lucha de robots y humanos. También tendremos otros coleccionables en forma de esmeraldas, siendo un total de 40 más una final al recolectar las principales.
Pero es con las ilustraciones que Zee irá haciendo de la fauna y flora de este hermoso mundo, donde más se va a mostrar su humanidad y que si bien como coleccionable realmente no cuentan, si que resulta bastante interesante el ir viendo la progresión de todo lo que nos vamos encontrando en nuestro camino.
Todo esto, aunque pueda parecer irrelevante en un principio, iremos viendo que entre los textos del diario y las ilustraciones, sumado a ciertos momentos en los que la conciencia de nuestro pequeño robot va encontrando el sentido de la vida, nos irá enseñando que realmente los androides pueden llegar a soñar con ovejas eléctricas, así como tener sentimientos y emociones, lo que les lleva a de alguna forma, tener alma.
Apartado Técnico
Visualmente, Europa resalta mucho gracias a un estilo inspirado en Studio Ghibli, que llena el ambiente de colores pastel y detalles con cierta serenidad, creando una atmósfera casi hipnótica. Eso sí, hay un contraste entre la belleza del mundo y las frustrantes restricciones para aquellos que buscamos salirnos del camino lineal que ofrece y al que se presta sin querer.
Europa se destaca en el aspecto gráfico, con texturas, sombras y efectos de iluminación que hacen justicia a la atmósfera de tranquilidad del juego. La interfaz es simple, sin excesos ni sobresaturación de elementos que distraigan del paisaje, con una música suave y armónica que incluye toques de piano y efectos de sonido que evocan una sensación de paz.
Sin embargo, a pesar de su apariencia cuidada, el juego presenta varios problemas con la precisión de los controles y la cámara, lo cual es un dolor de cabeza cuando intentas ejecutar saltos precisos. Además, el sistema de combate es muy básico y tiende a volverse repetitivo, por veces tedioso y aburrido, enfrentándonos a unos enemigos que no ofrecen en ningún momento un reto interesante y pueden interrumpir la experiencia sin aportar demasiado a la narrativa.
Europa viene con textos en español perfectamente traducidos, aunque carece de doblaje a nuestro idioma, pero eso si, la actuación de voz original es sublime.
Conclusiones de Europa
Europa es una experiencia visualmente impresionante y emocionalmente resonante, ideal para los fans de los juegos de exploración con un enfoque artístico. Sin embargo, los problemas de control y la falta de profundidad en el diseño de niveles pueden frustrar a los jugadores que esperen algo más desafiante o interactivo. Este título es perfecto para quienes buscan una experiencia relajante y que no exija demasiado a nivel de precisión.
Con un poco de paciencia, Europa ofrece una hermosa reflexión sobre la humanidad y la naturaleza, aunque su ejecución técnica deja algunas áreas de mejora. ¿Es Europa una joya indie? Quizás, aunque su brillo esté un poco opacado por algunas asperezas en la jugabilidad.
Nota: 6/10
*Este análisis ha sido realizado con una copia digital proporcionada por Future Friends Games.
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