23 de noviembre de 2024
Review Yellow Taxi Goes Vroom PC

Análisis Yellow Taxi Goes Vroom – PC

El psicodélico y desmadrado homenaje a los juegos de Nintendo 64

Matteo y Lorenzo, o lo que es lo mismo, los dos desarrolladores que forman Panik Arcade, junto a Those Awesome Guys nos traen con Yellow Taxi Goes Vroom lo que ellos mismos definen «un reflejo de su personalidad» y con la que rápidamente uno se siente en parte también reflejado rápidamente y más si ha tenido la suerte de disfrutar en su momento de la legendaria consola Nintendo 64, por eso admito que mientras jugaba y preparaba esta review, ha sido como volver a finales de los 90, aunque no sin ciertos peros, quizás causado por ver ya con otros ojos la escena «videojueguil».

Eso no quita en absoluto que me lo haya pasado muy bien jugando este, por momentos, caótico título de plataformas y coleccionables a la vieja usanza con, o mejor dicho, sin botón de salto, aunque sí con una opción que aprendiendo a utilizarla debidamente, junto a otros combos, vamos a poder conseguir llegar a rincones y puntos de los diferentes mapas que en un principio nos pueden parecer imposibles.

Review Yellow Taxi Goes Vroom PC

Con un montón de referencias e inspiraciones, que no plagios, en Yellow Taxi Goes Vroom vamos a tener que movernos por distintas zonas ramificadas y todas con un denominador en común. La Isla de la Abuelita que guarda muchos más secretos de los que pensamos, así que toca ponerse el sombrero, más bien uno de tantos disponibles, para descubrir qué está pasando tras la extraña invasión alienígena y la opresión que está ejerciendo el magnate y director general de Tosla, misteriosamente llamado Alien Mosk, quien ha ido dejando unos engranajes contaminados (o llámalo X) repartidos por las diferentes ubicaciones. ¿Mosk-eante, verdad?

Nuestra misión, que comienza en el laboratorio de un tal Morio (nada que ver con cierto fontanero, pero con el que guarda un extraño parecido), nos llevará a recorrer y aprender las distintas formas de movernos entre plataformas y zonas mientras aprovechamos a recoger ciertas monedas acumulables y canjeables por sombreros y también los ya citados engranajes, que servirán todo sea dicho, para abrir nuevas zonas bloqueadas, la mayoría con misiones a contrarreloj para recolectar coleccionables o teniendo que ejercer como taxista para los estrafalarios personajes que nos vamos a encontrar.

Review Yellow Taxi Goes Vroom PC

Pero antes de continuar, dejad que os muestre su molón tráiler para que os hagáis una idea de lo que os vais a encontrar con esta ida de pinza llamada Yellow Taxi Goes Vroom.

Un juego de plataformas sin botón de salto

Lo cierto es que resulta bastante confuso en un principio. Me costó un rato pillarle el truco al juego, quizás ya me estoy haciendo mayor para este tipo de juegos porque incluso a veces me he llegado a sentir un poco mareado por los movimientos de cámara y el control del juego o su exagerado por momentos efecto de aberración cromática, pero en el momento que te comienzas a acostumbrar, todo resulta mucho más fácil e incluso intuitivo, porque el juego al igual que muchos títulos de antaño, explica lo justo.

Esto nos lleva a tener que ir descubriendo por nosotros mismo algunas cosas, para qué sirven y por donde tener que ir, aunque al final en Yellow Taxi Goes Vroom, siempre algún npc nos explica a su manera cosas, o damos con una puerta negra, que en realidad es una textura que puede pasar desapercibida de una primera, segunda o tercera pasada, y sirve para que entremos en otra sección o zona del juego y ahí descubrimos que estamos en una tienda de sombreros o nuevo mapa. Mi recomendación: estámpate contra todo, aunque terminarás por hacerlo igualmente.

Review Yellow Taxi Goes Vroom PC

Y aún os estaréis preguntando… ¿Cómo puñetas puedo saltar y acceder a zonas altas donde hay tropecientas monedas, cofres y los engranajes del malvado Alien Mosk dueño de Tosla?, que por cierto, cualquier parecido con personajes reales es pura casualidad y el mismo Yellow Taxi Goes Vroom lo deja claro al principio.

La respuesta a la anterior pregunta es bien sencilla. En nuestro taxi, además de la posibilidad de plantarle diferentes sombreros, tenemos un impulso que podemos hacer funcionar hasta tres veces (dos en un principio), que sabiendo controlar en el momento exacto y junto al acelerador, freno o ambos a la vez, para poder así impulsarnos con rampas o aprovechando objetos que nos sirvan para hacer una especie de «parkour» o rebotar en ellos y así llegar a niveles superiores para seguir coleccionando las ya citadas monedas, cofres, engranajes y alguna que otra sorpresa más.

Como se suele decir, Yellow Taxi Goes Vroom es fácil de aprender, difícil de dominar. Pero nada que no se consiga como antaño, con horas y horas de juego y práctica. Aquí no te dan nada masticado como se suele hacer en la mayoría de juegos hoy día.

Review Yellow Taxi Goes Vroom PC

Apartado técnico

Tal y como ya habréis dado cuenta por el tráiler o las capturas que acompañan a esta review, el juego parece sacado del catálogo noventero de la consola Nintendo 64. Esto claramente está hecho con toda la intención del mundo y si se me permite, bastante bien conseguido en todos los aspectos, todo sea dicho. Pero esto va más allá en el momento que el juego nos presenta personajes y escenarios tan estrafalarios como divertidos que hacen homenajes no solo a Super Mario 64 o Crazy Taxi, si no también a Radikal Bikers, Bomberman y otros tantos juegos de la época o incluso personajes y referencias a la cultura pop de entonces y como no, de la actualidad.

Todo esto se presenta con un diseño artístico con polígonos como puños y texturas, para mi gusto, estas últimas en una calidad en HD que no pega muy bien, aunque si que se pueden tocar ciertos ajustes como un filtro CRT y la curvatura de pantalla para imitar un antiguo televisor. Lamentablemente, la aberración cromática no se puede desactivar, aunque sí incluye opciones para desactivar efectos que puedan molestar a personas que puedan sufrir de epilepsia o problemas de vista, así como opciones para daltónicos.

Review Yellow Taxi Goes Vroom PC

Los sonidos del juego tratan de imitar a la perfección que se podían escuchar en títulos similares de aquellos años y la banda sonora, sin ser muy llamativa, cumple sobradamente su función, aunque tras terminar la correspondiente sesión de juego, no es de las que terminemos recordando.

Yellow Taxi Goes Vroom viene traducido al español, aunque aún contiene muchos errores y carencias en los textos, apareciendo repetidas veces la palabra «missing», aunque esto último no se si es un problema en sí o es que los desarrolladores han decidido hacerlo de esta manera. Es un misterio muy misterioso.

Review Yellow Taxi Goes Vroom PC

Conclusiones de Yellow Taxi Goes Vroom

Se podría decir que este homenaje a los videojuegos de Nintendo 64, sufre de una serie de altibajos que al igual que la palabra «missing», no sé si se tratan de errores «per se» o simplemente se tratan de referencias sutiles que acompañan a otras que ya no lo son tanto y que a veces pecan de ser grotescamente exageradas.

Por lo demás, este título ofrece muchas horas de juego buscando todos los coleccionables y principalmente los engranajes que hay repartidos por todos los mapas del juego, que no son pocos y se puede llegar a decir que casi exagerada la cantidad de ellos. Pero es ideal para los que les encanta rebuscar hasta en el rincón más escondido e incluso añade un reto para los speedrunners en su obsesión de hacerse con todos los coleccionables en menor tiempo posible.

Tanto si sufres de diógenes de coleccionables, como si eres un speedrunner o alguien que ama los juegos retro noventeros de plataformas en 3D, sin duda alguna Yellow Taxi Goes Vroom es tu juego.

Nota: 7/10

*Este análisis ha sido realizado con una copia digital proporcionada por Future Friends Games

Foto del avatar

Joshkerr

Gamers never quit, we simple restart. Ludo, ergo sum. Master Race sin RGBs, modder, padre de gatetes, me flipan los Porsche, devorador de cómics y libros, cinéfilo, "seriéfilo" y enamorado de las pelirrojas

Ver todas las entradas de Joshkerr →

Deja una respuesta