Aye, Sir!
El mundo del anime es altamente fascinante. La gran cantidad de obras que se ofrecen por temporada sirve para saciar el hambre de cualquier otaku redomado que se precie, pero solo unos pocos logran la fama y el reconocimiento necesario para volverse clásicos instantáneos. Me sería imposible contar con los dedos de mis dos manos los animes que he visto, me han gustado, pero que nunca han llegado a tener una continuación por culpa de unas métricas que no cuadraban, o de una percepción del público que no había sido la esperada por los responsables.
Muchos os preguntaréis por qué empiezo hablando de esto, dado que este no es en absoluto el caso de Fairy Tail, y es que podríamos estar ante el que fue mi primer anime masivo. Anteriormente ya había visto obras de gran calado como Sword Art Online o Tokyo Ghoul, pero para el momento que las vi ambas contaban únicamente con dos temporadas, mientras que Fairy Tail me ofreció dos temporadas, pero con una infinidad de episodios en cada una.
Cabe señalar que me enamoré perdidamente. Quizá hoy en día no me gustaría tanto, pero esos personajes planos y simples, pero carismáticos de alguna manera, su banda sonora inigualable, y unas tramas que conseguían tenerme al borde de la extenuación por momentos, para a los 10 minutos llenarme la cara de lágrimas, fueron los elementos que más me enamoraron.
Por supuesto, sabiendo esto, y como amante de los videojuegos, sería natural que fui de los primeros en correr a comprar el primer juego de Fairy Tail, pero por desgracia no fue hasta este mismo año 2024 cuando por fin he podido jugarlo. Ahora, con todas las tareas hechas, he tenido el placer de jugar unas horas de Fairy Tail 2, la secuela del título lanzado en 2020, y que en este caso nos sitúa en la masiva batalla contra Alvarez, y por extensión contra Zeref, el malo maloso de esta franquicia.
Antes de empezar, eso sí, me gustaría advertir de que más adelante habrán algunos spoilers del arco final de Fairy Tail, el cual se adapta en este segundo videojuego de la franquicia.
Una evolución interesante
Muchas personas no vieron con buenos ojos que el primer título de Fairy Tail adoptara un sistema de combate por turnos, y la verdad es que me puedo incluir entre estas personas. Las batallas que vemos en el manga y anime de esta obra son frenéticas, tanto que en muchas ocasiones terminan en pocos segundos gracias a un puñetazo o rugido de Natsu, lo que no casaba muy bien con la experiencia que pueden ofrecer los JRPG por turnos. Además, en este caso tenía un componente de cuadrículas que no era especialmente interesante, y que lastraba mucho la experiencia de combate.
En este caso, Fairy Tail 2 tira todo a la basura (metafóricamente), para ofrecer un sistema de combates, todavía por turnos, pero mucho más frenético y divertido. En este, podremos atacar en cualquier momento, y nuestros enemigos así lo harán, pero se termina volviendo por turnos gracias a una barra que debe llenarse para poder efectuar nuestros movimientos. Esto en un primer momento puede ser un lastre, y yo particularmente por momentos me sentí frustrado, pero tras algo más de práctica pude notar lo que se había querido hacer aquí. En esencia, es un híbrido entre un combate por turnos clásico y un combate en tiempo real, ya que no solo tendremos que esperar hasta que termine de llenarse la barra, sino que tendremos que idear estrategias para poder hacer la mayor cantidad de ataques seguidos antes de tener que volver a esperar.
En mi primer combate, que por cierto es contra uno de los Spriggan 12, terminé algo incómodo y con pocas ganas de seguir combatiendo con este sistema, pero en cuanto me adentré en el primer capítulo oficial de la aventura sentí un alivio enorme. Con cada combate iba comprendiendo más y más lo que se había ideado. Desconozco cómo evolucionaran más adelante en la aventura, pero en lo que podríamos llamar el principio termina siendo un sistema de combate divertido, bien pensado e incluso frenético.
No es el combate en tiempo real que muchos esperaban encontrar en un juego de Fairy Tail, pero la verdad es que cumple con creces. Además, también he podido notar que cada personaje se siente totalmente único. Por ejemplo, tras mis horas de juego, mi equipo de personajes en combate preferido terminó siendo Natsu, Gray y Laxus, pero también podría destacar a otros personajes como Wendy o Erza.
Además, cabe destacar que en general nos encontramos ante un JRPG en toda regla, y por tanto los combates nos permitirán evolucionar a nuestros personajes, lo que a su vez hará que puedan desbloquear algunos de sus ataques especiales icónicos de la serie. Esto podremos hacerlo de forma manual, con un sistema que de primeras me ha parecido complejo de más, pero también podremos hacer que se haga de forma automática, lo que nos permitirá centrarnos en otras cosas.
En tiempos de guerra…
Como ya comentaba, este segundo juego empieza poco después del inicio de la última temporada del anime, con el gremio yendo a rescatar a su Maestro. Estos nos sitúa, por tanto, en los momentos previos a la guerra contra Alvarez, y por tanto en uno de los mejores arcos de la obra original.
Cabe destacar, por tanto, que a este título le ocurre lo mismo que a la obra original. Si bien ofrecen explicaciones sobre quiénes son los personajes y demás detalles, estamos hablando de un juego pensado para aquellos que hayan visto el anime o leído el manga, a diferencia de otros títulos de este estilo que tienden a actual como una adaptación más de los acontecimientos desde el principio. Según mi experiencia con esta preview, debo señalar que si nunca has visto o leído Fairy Tail y empiezas con esta secuela no entenderás absolutamente nada, pero lo mismo ocurrirá con aquellos que únicamente hayan jugado al primer título y luego se quieran adentrar en este.
Más allá de eso, y como alguien que ha visto el anime un par de veces y en su momento leyó el manga completo, debo decir que la adaptación parece haberse hecho con cariño. Desde la cinemática inicial, que podría actuar como un remake con gráficos en 3D de los acontecimientos del anime, hasta los diálogos que podemos tener con los personajes, todo emana un cariño enorme por el material original. Desconozco si momentos posteriores, como la batalla contra Acnología o el combate de Erza y Wendy contra Irene, que son piezas fundamentales de este arco, lograrán tener el mismo impacto que tienen en sus materiales originales, pero hasta donde yo he visto apostaría a que la respuesta es afirmativa.
Muchos os preguntaréis en qué me baso para afirmar esto de forma tan tajante, y la verdad es que podría decir que lo digo en base a las emociones que me ha transmitido lo que he podido jugar, las cuales han sido extremadamente similares a las que tuve viendo el anime. Además, ciertas misiones, como una que ocurre justo previamente al ataque de Alvarez, me ha demostrado que los responsables han tenido cariño a los detalles.
Fiore podría sentirse algo mejor
Quizá lo que más curioso me parece es que gráficamente no he visto una gran evolución. Sí, en las cinemáticas resulta impresionante, y como he dicho, podría pasar por un remake en 3D de la obra original, pero es cuando nos ponemos a jugar cuando todo cambia. Desde animaciones algo robóticas, hasta diseños de personajes secundarios que se notan poco cuidados, todo ello contribuye a que no note un cambio significativo respecto a su predecesor en este sentido.
Eso sí, cabe señalar que Fairy Tail 2 todavía no se ha lanzado al mercado, y puede evolucionar bastante en el tiempo que queda, pero he terminado con sensaciones mixtas. Los diseños de los personajes principales están muy cuidados, y las animaciones de sus ataques me han enamorado en su mayoría, pero en cuanto nos alejamos de ahí vemos un mundo mucho más simple en este sentido. No quiero que se me malinterprete, los escenarios que he visitado gráficamente y conceptualmente están bien, pero no destacan en absoluto respecto a su predecesor.
Por supuesto, es un juego de anime y todos sabemos lo que ello significa. Pero francamente esperaba un salto relativamente sustancial respecto a su predecesor, especialmente teniendo en cuenta que ahora nos encontramos en una nueva generación de consolas.
Más allá de esto, debo decir que lo que sí me ha convencido es el aspecto sonoro. No solo contamos con los actores de voz originales, sino que la banda sonora es impresionante. Por desgracia, no contamos con las canciones clásicas de la franquicia, las cuales son legendarias como poco, pero el equipo responsable ha logrado ofrecer algunas canciones que están a la altura, en algunos casos imitando los acordes de aquellas que pudimos escuchar en el anime.
Por desgracia, esta secuela tampoco cuenta con traducción al español, un movimiento que sigo sin entender. En mi experiencia con sus primeras horas puedo decir que el inglés usado no es especialmente complejo, y cualquiera con un nivel medio podría jugarlo probablemente sin problema, pero no deja de ser un verdadero inconveniente.
Acercándonos a la victoria contra Zeref
Como ya comentaba, he podido jugar alrededor de 4 horas, y mi opinión sobre esta parte del juego es posible que no pueda extrapolarse al juego final, pero la verdad es que he salido contento. No solo han cambiado el sistema de combate para que sea mucho más ágil y frenético, sino que en este caso nos adentramos en el que es mi arco favorito de todo Fairy Tail. Me guardo ciertas dudas, especialmente relacionadas con su apartado técnico, pero en general debo decir que no solo me ha gustado mucho, sino que ha hecho que me ponga a verme Fairy Tail por tercera vez. Así de buena me ha parecido la adaptación de las primeras horas que he jugado.
*Estas primeras impresiones se han realizado con una clave de preview proporcionada por PLAION.