Una aventura para salvar al mundo con dados y bestias
La inclusión de dados y cartas como mecánicas en los videojuegos ha ido teniendo una evolución muy curiosa a lo largo de los años, comenzamos con simples juegos que lo único que hacian era traspasar juegos clásicos de sobremesa a un medio digital, como el solitario, el Yahtzee y demás. Luego empezaron a meter pequeñas variaciones sutiles que en un juego de carta tradicional no se podrían ejecutar, como potenciadores o elementos aleatorios que una baraja o un par de dados no te pueden otorgar. Ahora, hay una nueva variedad de juegos que usan métodos de azar tradicional para crear nuevas experiencias, como podrían ser Dicey Dungeons, Slay The Spire o el título del que venimos a hablar hoy, Dicefolk.
Dicefolk es un título roguelike y de estrategia desarrollado por LEAP Game Studio y distribuido por Good Shepard Enterteinment en el que tendremos que convertirnos en un Dicefolk, un mago capaz de controlar criaturas que asolan el mundo controlado todas ellas por un mismo maestro maligno, con el objetivo de recuperar la paz y salvar a la humanidad
Unos dados con gran poder
La historia de Dicefolk es sencilla, pero algo curiosa, en este mundo existen unas poderosas criaturas conocidas como las Quimeras, criaturas fantásticas con poderes sobrenaturales que son a veces temidas como heraldos del apocalipsis, otra vez como protectores de los justos y otras veces como simples mitos y leyendas contados por los lugareños. Un día, un poderoso brujo oscuro conocido como Salem sometió bajo su control a algunas de las quimeras más poderosas jamás conocidas e intento destruir a la humanidad, ahora se encuentra durmiendo en lo más profundo de una montaña, mientras sus huestes de quimeras malvadas someten a los humanos bajo un puño de hierro.
Pero ha llegado el momento de acabar de una vez por todas con Salem y su reino de terror, nosotros somos un Dicefolk un tipo de mago que tiene bajo su control una serie de dados imbuidos en una magia especial que permite controlar la mente de las quimeras y asi poder someterlas a nuestra voluntad para formar nuestro poprio ejército y darle a Salem una ración de su propia medicina.
Un mundo controlado por el mal
Las partidas en Dicefolk comienzan todas de la misma manera, primero tendremos que elegir nuestro talismán, para que nos entendamos es como el arquetipo de las quimeras que podremos encontrar a lo largo de la aventura, al principio solo tendremos uno para elegir y las opciones de quimeras a encontrar es limitada. Conforme derrotemos enemigos, jefes y avancemos por las diversas zonas, nuestro talismán irá mejorando, desbloqueando así mejores quimeras, objetos y beneficios para facilitar nuestro progreso. Yo lo digo desde ya, olvídate de ganar las primeras partidas, y si es así, es gracias a tener mucha suerte, porque este juego requiere de morir para avanzar.
Al comenzar cada partida de Dicefolk apareceremos en un mapa dividido en nodos, cada nodo tendrá un efecto diferente cuando nos desplacemos entre a ellos, los más destacados son los combates y combates de elite, donde tendremos que enfrentar a nuestro equipo de quimeras contra los ejércitos de Salem, luego de esto tendremos las estatuas de Quimera, dentro de estas estatuas se encuentra encerrada una quimera, en cada mapa hay tres de estas estatuas, podremos ir a cada una de ellas y elegir la quimera que más nos guste, sin embargo, una vez elijamos una, las otras desaparecerán para siempre.
Adicionalmente, si elegimos una quimera de una estatua y no hemos visitado las otras estatuas, estas se convertirán en cofres que contienen objetos curativos, oro y demás cositas interesantes que nos harán replantearnos si queremos pillar la primera quimera que nos llame la atención o aguardar un poco. Además de todo esto, cada mapa también puede contener una tienda o algún evento que nos recompense con nuevos objetos, pero siempre, tendremos que derrotar a un jefe para avanzar al siguiente mapa.
Controlar enemigos y aliados
El combate en Dicefolk es bastante curioso. Estaremos divididos en dos equipos de tres quimeras cada uno, aliados y enemigos, equipo cuenta con un líder, que es el que se encuentra en la parte delantera, y ambos equipos tienen una serie de dados que pueden ejecutar acciones como atacar con nuestro líder al líder enemigo, rotar a nuestro equipo en alguna dirección (cambiando así de líder) o activar un escudo que nos protegerá de cualquier daño físico.
Ambos equipos tienen tres dados y es decisión nuestra qué dados jugar y cuando jugarlos. En cada turno podemos usar el número de dados que nos pertenezcan a nosotros que queramos, pero para avanzar al siguiente turno tendremos que usar todos los dados del rival, esto es curioso porque seremos nosotros los que elijamos de manera consciente que enemigo queremos que ataque primero y a cuál de nuestros aliados, creando una forma de estrategia única.
Las Quimeras que nos ayudarán en combate en Dicefolk no son simples atacantes, muchas de estas cuentan con efectos que podremos leer si pasamos el cursor sobre ellas, al igual que las quimeras enemigas, algunas atacan si al empezar la partida se encuentran en el estado de líder, otras lo harán si al acabar el turno no tienen la salud completa, otras, en cambio, cuentan con habilidades conocidas como «Magia» la magia son habilidades que podremos activar una vez por turno si hacemos clic en la quimera que la tiene, activando el efecto que describe.
Es importante tener en cuenta las habilidades pasivas y activas de nuestras quimeras y las enemigas para poder crear una estrategia que nos permita salir con vida en cada combate, porque las quimeras solo se podrán curar en un campamento o tras vencer al jefe de área, así que la supervivencia es vital. Además, podremos encontrar a lo largo de nuestra aventura objetos con los que equipar a las quimeras que podrán proporcionar beneficios de estadísticas o efectos adicionales si se cumplen ciertas condiciones tanto a esa quimera como al resto del equipo.
Un mundo bello y en caos
El aspecto visual de Dicefolk me ha gustado mucho, desde nuestro pequeño monigote en el mapa a los iconos de los diferentes lugares que podemos visitar a los diseños de las quimeras tanto en el compendio como dentro del combate, algunas siempre fieras bestias provenientes de leyendas y mitos y otros siendo pequeños monstruitos adorables que solo quiero achuchar, hacen una dicotomía que me mola demasiado, los efectos de particulas en los ataques aunque en algunos casos son escasos pegan con este estilo visual de manera perfecta y lo realzan. Otro gran punto de su aspecto visual son las cinemáticas que vemos al principio, unos murales pintados que cuentan una leyenda antigua, así como las tiendas y sus misteriosos vendedores que nos otorgan el poder de curiosos artefactos de orígenes desconocidos.
La música fue sin duda un aspecto que me sorprendió, la calidad es bastante buena y la música de combate una grata sorpresa, la banda sonora del título juega con temas más tranquilos cuando nos hayamos explorado el mundo o mirando que nos podemos comprar en las tiendas y contemplar las quimeras que nos ofrecen los santuarios. Cuando la música se pone en su mejor momento es en los combates, y sobre todo, en los combates contra jefes, eso si, he de decir que pese a que la banda sonora es muy buena, todos los combates comparten un tema único así como todos los jefes también cuentan con un solo tema musical, que yo personalmente esperaba que cambiara junto con el área en él fuese encontraba, pero es un detalle menor.
Conclusiones de la review de Dicefolk
Dicefolk es un título roguelike bastante curioso que nos da el control no solo de las acciones de nuestros aliados en cada combate sino también de nuestros enemigos, las decisiones tácticas que podemos tomar al vuelo durante un combate para distribuir el daño de la mejor manera, las diferentes habilidades de las quimeras, los objetos que podremos equiparles y las diferentes caras de los dados, cada una con efectos únicos y maleables hacen que cada partida se convierta en una combinación de estrategia, astucia y su justo toque de aleatoriedad para que no nos confiemos.
El juego es realmente interesante, tendremos que superar las tres fases del juego con cada uno de los talismanes para abrir la puerta de Gaia tras la que se encuentra nuestro mayor reto, Salem, cada vez que una quimera llegue hasta la puerta de Gaia se le otorgara una marca como que ha completado una partida, así que si quieres puedes cumplir el reto personal de llegar a la puerta de Gaia una vez con cada una de las quimeras. La dificultad en algunos casos, si no tienes desbloqueados objetos y quimeras parecerá que escala en vertical, pero conforme vayas desbloqueando recursos y quimeras y aprendiendo el funcionamiento interno del juego, te sorprenderá los avances que puedes conseguir.
Nota: 7/10
*Este análisis ha sido realizado con una copia digital proporcionada por Cosmocover